Una del las mejores herramientas de marketing directo es el conocido como Sampling,la distribución de muestras que permite dar a conocer un producto de una forma rápida y directa, teniendo como principal ventaja que acorta el tiempo que transcurre entre el primer contacto del cliente potencial con el producto y su compra.
Las empresas que se dedican a la comercialización de artículos de consumo son las primeras que comenzaron a utilizar esta herramienta promocional, pero con el paso del tiempo han ido sumándose otros sectores que permiten probar cualquier tipo de producto antes de su compra.
El Sampling se utiliza por lo general para el lanzamiento de nuevos productos pero también es recomendado utilizarlo para reforzar las ventas, para recordar a los usuarios la existencia de productos o para dar salida a artículos difíciles o que caducan en breve.
Esta técnica puede llevarse a cabo en un punto de venta, por correo, en la calle o en centros comerciales y otros espacios públicos, en los que las azafatas o promotoras se encargan de ofrecer los productos a aquellas personas que encajen en el target o público objetivo que se haya determinado para la campaña. Además la profesional será la encargada de solucionar cualquier duda que pueda tener el cliente, para lo cual debe tener conocimientos acerca del producto o servicio que se ofrece durante la campaña.
El Sampling se recomienda a la hora de lanzar al mercado una nueva campaña, siendo aconsejable llevar a cabo pruebas a pequeña escala y extenderla si funciona con ese producto en concreto.
Para los clientes potenciales es importante poder probar un producto antes de proceder a su compra, por lo que este tipo de campañas pueden llegar a tener una gran eficacia. Sin embargo, el profesional debe ser capaz de persuadir al usuario para que tras probarlo se decida a adquirirlo.
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Fuente: Grupo Novo Event